#OrgulloMx Productores defienden cultivo de amaranto
A pesar de los embates de la crisis económica y el incremento a los precios de las gasolinas.
El aumento elevó hasta en 30 por ciento los costos de producción, según el presidente del Consejo Estatal de Productores del Sistema Producto Amaranto de Tlaxcala, Perfecto Barrales Domínguez.
De acuerdo con el Sistema Nacional de Recursos Fitogénicos para la Alimentación y la Agricultura (Sinarefi) organismo dependiente de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) la superficie sembrada de amaranto en el país creció de 2 mil a casi 5 mil hectáreas entre 2005 y 2014.
El amaranto es una semilla originaria de las zonas tropicales de Mesoamérica, sin embargo, en México su cultivo y aprovechamiento se ha manifestado a lo largo de milenios en diferentes productos.
La planta, que se cultiva principalmente en el centro y sur del país, fue parte de la dieta de los pueblos prehispánicos, pues junto con el consumo de maíz y frijol, otorgaba el contenido proteínico necesario.
De acuerdo con la asociación civil México Tierra de Amaranto, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por sus siglas en inglés) consideró a la semilla como el mejor alimento de origen vegetal para el consumo humano.
La Asociación Mexicana del Amaranto, otra agrupación civil, recordó que la semilla fue seleccionada por la NASA para alimentar a los astronautas, debido a su alto valor nutricional, su aprovechamiento integral, la brevedad de su ciclo de cultivo y su capacidad de crecer en condiciones adversas.
La variedad de productos derivados de la planta ha crecido y ya no sólo se ofertan las tradicionales barras de cereal con miel (conocidas como alegrías) sino que está disponible en harina, tortilla y hasta en bebidas, galletas y panqués.