Migrando por la desigualdad
Las imágenes de menores de edad viajando solos y arriesgando su vida para reunirse con algún familiar en Estados Unidos, son preocupantes.
Por: Kenia López Rabadán*
En los últimos años, ha aumentado el número de personas migrantes que llegan a nuestro país con la esperanza de llegar a Estados Unidos de Norteamérica y tener una vida mejor.
Las causas por las que gente originaria de Honduras, El Salvador y Guatemala emprenden esta migración, son diversas. Según la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), la gente huye de la violencia, de las amenazas, de la extorsión, del reclutamiento de las bandas criminales, de la prostitución, de la violencia sexual, y sobre todo, de la pobreza.
La pandemia por la Covid-19, ocasionó que el fenómeno migratorio se incrementara, ya que en sus países de origen, no tienen las condiciones de salud suficientes, ni políticas de vacunación eficientes para salvaguardar su vida y la de sus familias.
Por ello, en los primeros tres meses de este año, las solicitudes de refugio que ha recibido México, se incrementaron. La Comisión de Ayuda a Refugiados (Comar), reportó que 1,169 guatemaltecos, 1,793 salvadoreños y 11,574 hondureños han solicitado refugio en nuestro país. En total, se han recibido 22,606 solicitudes de todas las nacionalidades, lo que representa un incremento del 31% en comparación con años anteriores.
Esta situación, origina que personas traficantes de indocumentados se aprovechen de la necesidad de los migrantes y oferten –incluso mediante redes sociales-, paquetes para cruzar al vecino país del norte. Se ha hecho público en distintos medios de comunicación que los denominados “coyotes” cobran entre 8 mil y 11,500 dólares, lo que equivale entre 160 mil y 230 mil pesos por persona.
Es importante recordar que la Ley de Migración, establece que el tráfico de personas se castiga con hasta 16 años de cárcel, por lo que se debe investigar si hay colusión entre autoridades municipales, estatales y federales en este delito.
Las imágenes de menores de edad viajando solos y arriesgando su vida para reunirse con algún familiar en Estados Unidos, son preocupantes. En muchos casos, son víctimas de delitos como la desaparición, la trata o son asesinados, por lo que se debe poner especial atención en este tipo de casos.
Es urgente proteger, respetar y garantizar los derechos humanos de las personas migrantes, por lo que es de reconocer la disposición del gobierno de Estados Unidos, mediante la Vicepresidenta Kamala Harris, de acordar con el gobierno mexicano, fortalecer los mecanismos binacionales para compartir inteligencia con el propósito de combatir las redes transnacionales de traficantes de personas que ponen en riesgo la seguridad de las personas migrantes.
Se tiene que poner especial atención en que los 10 mil elementos de la Guardia Nacional que serán enviados a la frontera sur de México, los 1,500 soldados y 7 mil policías de Honduras, no vulneren los derechos y libertades de quienes migran de sus países esperando tener un mejor futuro.
*Senadora. Presidenta de la comisión de Derechos Humanos.
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