Macedonio reposado
Después de 20 años, Salgado Macedonio regresa a la escena, pero en otra faceta. Ahora es el candidato repudiado.
Dobleces |
Por: Israel Mendoza Pérez
@imendozape
La ola de críticas a la candidatura de Félix Salgado Macedonio, a la gubernatura de Guerrero, por diversos señalamientos de abuso sexual ya llegó al cenit de la discusión. El presidente condenó con un “ya chole” la supuesta campaña en contra del candidato; sin embargo, aún está activo el caso en la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia (CNHJ) de Morena y con ello se espera ver la caída de un candidato con altos costos de credibilidad al exterior.
Por el perfil de quienes integran la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia de Morena se espera más empatía interna que lo existente hasta ahora en el debate fuera de la esfera del partido en el poder. De los cinco integrantes, al menos tres pertenecen y trabajaron en la lucha feminista. La presidenta de la CNHJ, Eloísa Vivanco Esquide se declara activista social y feminista de izquierda. La secretaria Donají Alba Arroyo, aliada de la agenda LGBTTTI y Zazil Carreras Ángeles es abogada feminista comprometida con la lucha social y derechos humanos.
Aunque no es garantía que su origen de lucha sea sensible en estos momentos por ocupar un espacio de poder comprometido con un partido político, ni tienen un papel de juez, lo que se espera es mayor empatía por la causa defendida en el pasado no sólo se trata de lo que conviene al partido sino lo políticamente correcto para el mejor funcionamiento de un partido nacido de las causas sociales más férreas como el del movimiento de las mujeres.
Desde las redes sociales, el movimiento feminista ya hizo su solicitud de “romper el pacto”. Ahora, no escuchar al pueblo es mostrar que la democracia es tan flexible como las conveniencias de quien es el protector de Salgado Macedonio.
Al ahora candidato se le recuerda por sus escándalos en la calle, todo un renegado en motocicleta y apoyado en su momento por el PRD. Pero también cuando era diputado perredista en el 2000 y atrajo los reflectores al denunciar el “águila mocha” símbolo utilizado en el sexenio de Vicente Fox. Iba de la ironía a la arenga de priistas y perredistas. El escándalo es su esencia y su mejor manera de hacerse notar. Así ha sido siempre Félix Salgado Macedonio.
Después de 20 años, Salgado Macedonio regresa a la escena, pero en otra faceta. Ahora es el candidato repudiado. La oposición observa un caso en el que desde la cúpula del poder minimizan, solapan y encubren a los abusadores; en lugar de escuchar y apoyar a las víctimas, investigar a fondo y actuar con firmeza se le da un virtual candidato condenado al desprestigio y desprecio no sólo de la oposición sino de los movimientos de mujeres.