Lucha contra la Mortalidad Materna

Por: Kenia López Rabadán*

Aunque el embarazo, el parto y el puerperio no son enfermedades, sino eventos naturales del ciclo reproductivo, bajo ciertas circunstancias, pueden conllevar a la muerte de la madre y también del recién nacido.

La muerte materna es definida actualmente como la muerte de una mujer embarazada o dentro de los 42 días siguientes a la terminación del embarazo, independientemente de la duración y el sitio del embarazo, debida a cualquier causa relacionada o agravada con el embarazo mismo o su atención.

Adicional a esto, y aunque no debe ser incluida para el cálculo de la razón de mortalidad materna existe lo que se llama muerte materna tardía, que es la muerte de una mujer por causas obstétricas directas o indirectas después de los 42 días pero antes de un año de la terminación del embarazo, y es relevante que estas muertes sean registradas, investigadas y analizadas como parte de los procedimientos de búsqueda de muertes maternas, dado que constituyen un indicador de calidad de la información de mortalidad materna y representan también un reto de salud pública.

A nivel mundial, de acuerdo con los datos más recientes recabados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada día tienen lugar alrededor de 830 muertes maternas.

En México, al cierre de 2019 tuvieron lugar – de acuerdo con la Dirección General de Información en Salud (DGIS) de la Secretaría de Salud- 695 muertes maternas, a lo largo de la última década, México ha logrado reducir la incidencia de la mortalidad materna en el país, que, si bien es una tasa significativamente menor a la existente en regiones como la áfrica subsahariana, queda aún lejos de países desarrollados. En 1988, se instituyó el 28 de mayo de cada año como Día Mundial de Acción por la Salud de la Mujer y la lucha contra la morbilidad y la mortalidad materna, esto a raíz de la propuesta realizada un año antes por la Red de Salud de las Mujeres Latinoamericanas y del Caribe (RSMLAC).

Es partir de este año que anualmente se conmemora este día, en el marco del cual se llevan a cabo diferentes acciones y campañas de información acerca de esta problemática que atañe a mujeres de alrededor del mundo, buscando sensibilizar a la población en general, así como a los tomadores de decisiones de la relevancia de tomar cartas en el asunto.

Es por este motivo que presenté una iniciativa ante el Congreso de la Unión, la cual busca aterrizar esta conmemoración al plano nacional, estableciendo el 28 de mayo de cada año como el “Día Nacional de lucha contra la Mortalidad Materna” conmemoración que coadyuvará en la sensibilización de esta delicada situación, sus causas, su incidencia tanto en términos de salud pública pero también en impacto socio-familiar de este traumático evento y las acciones de atención integral que hay que emprender desde el ámbito de política pública para prevenirla.

De igual forma, la consideración de esta efeméride en el calendario nacional promoverá la convergencia de los sectores público, privado, academia y la sociedad civil organizada a fin de generar mayor investigación, mejores protocolos de atención tanto preventiva como reactivamente y una mejor vigilancia epidemiológica, que en su conjunto ayuden a salvar vidas.

*Senadora / Presidenta de la comisión de Derechos Humanos