Los enojos de la tierra
Tal como ahora, quienes han hecho pruebas nucleares en el mar, detonando bombas y barriendo con ello a miles de especies marinas que pensándolo bien, vivían tranquilas, sin bullicio, en el silencio de la profundidad donde se obscurecía al meterse el sol y se iluminaba a la salida del astro rey.
De Oficio Reportero |
Muchos años atrás hubo quien avisó que a la Tierra que habitamos, el Mundo, vamos, se le estaban haciendo muchas cosas que la podrían alterar, molestar y que ello, podría tener reacciones peligrosas para la humanidad.
Tal como ahora, quienes han hecho pruebas nucleares en el mar, detonando bombas y barriendo con ello a miles de especies marinas que pensándolo bien, vivían tranquilas, sin bullicio, en el silencio de la profundidad donde se obscurecía al meterse el sol y se iluminaba a la salida del astro rey.
Siguieron los experimentos, el uso indiscriminado de combustibles fósiles que llevaron al efecto invernadero, a la alteración climática. A cambiar la extensión del mar, o reducirla para ganar terreno. Se comenzaron a producir intencionalmente quemando bosques para sembrar o llevando a pastar al ganado. Se acabaron con millones de hectáreas .
Se dieron los primeros y mas graves derrames accidentales de petróleo en el mar, ríos, arroyos, que llevaron muchos meses en recuperar algo de lo derramado que ya había matado animales acuáticos y pastos. Vinieron otros accidentes con sustancias nocivas, ve venenosas.
Y así, el animal mas destructor sobre la tierra se descubrió que era el HOMBRE. El cazador furtivo que eliminó de la faz de la tierra miles de ejemplares que por lo menos las tres últimas generaciones conocerá en fotografías. En la historia.
Aunado a eso, con el paso del tiempo, vinieron más incendios forestales, que, con los vientos, hicieron que se estableciera en California los llamados Vientos de Santana. Que como un gigantesco soplete consume no solo bosques, sino condados completos. Casas habitación, y construcciones diversas.
La deforestación dio paso a los Tornados que como gigantescos tornillos de furiosos vientos arrancan del piso todo a su paso . Arboles, postes, levantan aviones de hangares, trailers, furgones, animales, dejando a su paso, destrucción y muerte.
Vino también el aviso del CAMBIO CLIMATICO, consecuencia de las altas temperaturas una provocadas, las otras desde la atmósfera que iba cambiando periódicamente. Los fenómenos naturales fueron incrementando su furia, destrucción y sorpresa de la humanidad. Huracanes que como gigantescas escobas barren distintas latitudes del mundo. Las lluvias donde por siglos dejó de llover y salieron los desiertos que se inundaron, las inundaciones en Florencia, en Madrid, en Moscú, en Tokio, en ciudades de los Estados Unidos.
Los sismos con mayor intensidad, la aparición de virus letales como el Covid-19 que en afirmaciones incluso de un Premio Nobel de INFECTOLOGÍA de que fue creado en un laboratorio de HUWAN , China.
Antes el HN1.
La Tierra está muy enojada con la humanidad y se lo hace sentir, hasta arrastrando nubes de arena infectada con bacterias y virus desde del Sahara hasta Merida, Cancun o Campeche. Mostrando en Gigantescas cortinas de arena de los desiertos en el norte de México.
Ojalá se calme esta intensa molestia, antes de que la muerte se convierta en una estación duradera de cada año, Dios Mediante!!!!!.
POR: RAUL SANCHEZ CARRILLO
sanchezcarrillo.tv
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