La realidad que sacude

De Oficio Reportero |

POR: RAUL SANCHEZ CARRILLO

Nada mas fuerte en el muro que se estrellan las mentiras, las manipulaciones, los maquillajes o incluso los intentos de distraer la atención de millones de seres humanos como la REALIDAD.

Esta, que ubica, exhibe y ridiculiza a quienes pretenden creer que engañando avanzan en cualquier escenario, va creciendo día a día, como crecen las falsedades. Los errores que se quieren enterrar entre palabras de engaño no alcanzan para siempre para creer que este país se desmemoriados no pasa nada si se dice una cosa un día u otra, otro día.

Venimos de 900 días de sorpresa con saber que ya estaba en nuestro país el Coronavirus, termino que identifica a in micro virus de arrasadora presencia , contagio , muertes que superan las 117 mil y mas de un millón 300 mil contagiados. Si considerar en esta referencia, los casos confirmados o sospechosos y los que se han recuperado de esta pesadilla.

Hoy sabemos que las muertes que se siguen dando son porque los enfermos llegan tarde a su atención hospitalaria que ya requiere de un respirador artificial y que las posibilidades de arrebatarle a la muerte a la o el paciente. Muertes dolorosas , de impactos constantes .Dramáticos. Que en la soledad, sin familia para velarlos de cuerpo presente por una urna con cenizas ante lo imperativo de la cremación.

Pues aún sabiendo lo anterior, hay miles que se siguen exponiendo y contagiando  diario. Como una olla de leche al fuego, ha e empezado a subir el volumen de internamientos al grado de que esta a punto de derramarse, de rebasar la capacidad de recepción, atención y camas para quienes lo requieren.

Habrá tiempo de saber cuantos mensajes de advertencia, de mencionar las medidas preventivas , las declaraciones que advierten del peligroso nivel de contagios. De recoger testimonios o de quienes no usan cubre bocas, de las suplicas, si suplicas de enfermeras o doctores que expresan su cansancio, su agotamiento y su llamado al cuidado de las personas.

Tiempo habrá de ver y saber en esta realidad que se hizo y se ha hecho mal, que se ha hecho bien.

Tiempo de transitar por la pérdida no solo por el Covid sino por otras causas naturales o como lo llaman los médicos de muerte por necesidad.

Tiempo que es el enemigo que no se detiene. Que no cambia a la Realidad.

Tiempo que satura, harta, estresa, histeriza y agota a quienes le tememos al Coronavirus.

Tiempo aparte, para desearles a los lectores, que pasen lo mejor posible esta que será inolvidable Navidad y año.

Tiempo para pedir porque el 2021 sea mejor en todo.

Tiempo de comunicarles que nos reencontraremos el 6 de enero próximo.

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