En Segundos
En solo mil metros se fueron en segundos la vida de mujeres y hombres, una conductora y otras de copilotos.
De Oficio Reportero |
POR: RAUL SANCHEZ CARRILLO
Viajar por la autopista a Cuernavaca es ya una experiencia de ver los verdes de los pinos y montañas que de manera paralela, adornan el camino a la Ciudad de la Eterna Primavera.
Sus largas rectas y su zona de curvas para llegar a la “Pera”, por la forma de ese tramo de la vía, es para como desde el principio, observar los señalamientos de velocidad. De abrirse en la línea roja para que los vehículos sin frenos suban por la rampa de arena que los detendrá de una tragedia.
Los tableros eléctricos que indican la velocidad a la que se aproximan los automotores en de gran orientación. De manera oficial y para comprobar basta con circular en ella, para ver los tramos y el mantenimiento permanente ante los deslaves que traen piedras y rocas de los muros que se abrieron para hacer esa Autopista.
Sin embargo NADIE ha dicho que sea una pista de carreras. NADIE.
NADIE tampoco ha expresado que la cinta asfáltica permita probar y retar a los velocímetros de autos y menos de motocicletas para desbocar motores sin que se entre a la línea del peligro y al tramo de la muerte.
Lo acabamos de ver desgraciadamente el pasado domingo que, como cualquier otro sería de correr en motocicleta en la autopista. Correr sin peligrar. Sin que el vértigo de la velocidad se apodere de quien lleva el volante o el manubrio.
Hoy los modelos de las motocicletas diseñadas para desarrollar altas velocidades, con llantas traseras de piso mus ancho , de puños cortos de longitud.
De asientos que obligan a doblar la columna vertebral hacia adelante para junto con el casco que se lleva, corte el aire y no ponga resistencia.
Las advertencias de límites de velocidad no son cumplidas a cabalidad si acaso, solo los autobuses de pasajeros que traen en las llantas delanteras el llamado gobernador de velocidad.
Pero ya se han visto accidentes en donde un camión de pasajeros se despeña hasta abajo con saldo mortal de muchas vidas.
Los argumentos son los mismos. Perdió el control por exceso de velocidad . Se quedó dormido. Cosa que no pasa en motocicleta en el que va manejando pero SI pasa en el o la pasajera.
Todo pasa en segundos. Exceso de velocidad. Se rebasa la posibilidad de controlar la motocicleta y lo mas seguro es un accidente.
Antier murieron 7 motociclistas, 14 mas están heridos de gravedad. Muchas motocicletas japonesas o alemanas o norteamericanas en un kilómetro.
En solo mil metros se fueron en segundos la vida de mujeres y hombres, una conductora y otras de copilotos. Ver las escenas de cómo un motociclista se estrella con el muro de contención y vuela hasta quedar encima del acotamiento del carril contrario en medio de gemidos de dolor y confusión.
Ver como sus compañeros quieren al asistirlo, reanimarlo y pedirle que aguante, mientras otros bólidos se estrellan detrás de una camioneta parada saliendo de una curva y de un tráiler que sin frenos arrolla como pinos de boliche a otro grupo de motociclistas, mueve al deseo de que eso no suceda nunca mas.
La motocicleta se disfruta o se padece. En lo primero se cuenta. En lo segundo, lo cuentan.
sanchezcarrillo.tv
