El supersecretario Romo ya no es necesario
Hasta hace unas semana a Romo se le consideraba como el ideólogo y coordinador de la elaboración del Proyecto de Nación 2018-2024.
Dobleces |
Los buenos oficios del jefe del Gabinete Económico, Alfonso Romo Garza, se comienzan a deshilachar. Si bien se convirtió en el supersecretario en materia económica y de acercamiento con los integrantes de la iniciativa privada, el ataque del presidente Andrés Manuel López Obrador, al acuerdo entre Banco Interamericano de Desarrollo y el Consejo Mexicano de Negocios (CMN) “no me gusta mucho el ‘modito’ de que se pongan de acuerdo y quieran imponernos sus planes”, derrumbó la cercanía con el poder fáctico que siempre le ha tenido desconfianza.
Apenas el 7 de abril pasado, Dante Delgado rememoró, a través de una misiva dirigida al Presidente: ¿Recuerdas aquella memorable ocasión, cuando te presenté a Alfonso Romo? Él, como la mayoría de los empresarios, dudaba de ti. Los presenté para que lograras cambiar la percepción que tenían de tu proyecto y para que comenzaras a construir puentes, para que terminaras con la profunda confrontación que habías tenido con el sector productivo de este país.
Hasta hace unas semana a Romo se le consideraba como el ideólogo y coordinador de la elaboración del Proyecto de Nación 2018-2024. Antecedente del Plan Nacional de Desarrollo. Con ese aspecto a su favor se colocó encima del secretario de Hacienda, Arturo Romo y de economía Graciela Márquez; sin embargo, ahora está aislado y los integrantes de la IP están molestos.
Carlos Salazar Lomelín, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), detalló que las críticas del presidente Andrés Manuel López Obrador al acuerdo entre la iniciativa privada y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) es una confusión y que su gabinete no le explicó bien de lo que se trata dicho apoyo. De nueva cuenta, el silencio de Alfonso Romo se hizo notorio como si su experiencia ya no fuera necesaria para la cuatroté.
El pleito con los empresarios lo escaló el presidente un día más, el martes fustigó al acusar que “este tipo de ayuda se puede prestar a corrupción”. Al verlo de manera sesgada no comprendió que el tema de fondo es de liquidez de las empresas por ello se estiman recursos por hasta 12 mil millones de dólares en este acuerdo con el organismo multilateral con sede en Washington. No es un rescate ni se creará un Fobaproa como lo insinuó el Presidente, en la mañanera del lunes. El mecanismo financiero es una alternativa a las propuestas de créditos a la palabra del gobierno de la 4-T.
El tema se politizó desde que el propio gobierno federal se dividió, el canciller Marcelo Ebrard reaccionó a tiempo el domingo, igual que la secretaria de Economía Graciela Márquez y saludaron con beneplácito el acuerdo. Al día siguiente el Presidente acusó que lo quieran ver como “florero”.
El gobierno perdió la interlocución con la IP, Alfonso Romo el empresario que apostó al gobierno de la Cuarta Transformación pierde espacios de acción y la crisis con ese sector ya estalló. Ahora para avivar el fuego de las hornillas, la Coparmex habilitó al panista Javier Lozano como vocero especial de para la Defensa del Estado de derecho. Si el debate político está enrarecido, ahora se radicalizará con el ex secretario del Trabajo con micrófono en mano para contestarle desde temprano a López Obrador.
Por: Israel Mendoza Pérez