Confesión o sinceridad (Uno)

El Pico del Pollo

Por: Alfredo Albíter Sánchez

Soy policía de carrera, de academia y todo. En el servicio llevo 10 años, me han tocado asuntos casi de todo tipo. Por supuesto, hay momentos en los que digo, “qué chingados hago aquí, si podría estar en otro sitio trabajando como la gente normal y no arriesgándome a una encerrona.

Claro, muchas veces lo pienso, pero termino por convencerme que este soy y me encanta lo que hago”…Se trata de “Abel” -obvio no es el nombre real-, un hombre que no entró a la policía, porque era la única alternativa o lo que había, sino lo hizo pensando en ayudar, servir y -neta, neta- darle un “coscorrón” a los delincuentes.

Pese a obstáculos, decepciones y en algunos momentos mucha frustración, el ánimo decae muy pocas veces. Hay ocasiones que no entiendo las determinaciones tomadas para dejar en libertad a personas que entran y salen de la cárcel, como de su casa después de horas y horas de investigación, para finalmente “prenderlos” y presentarlos.

Eso sí “baja la pila”, pues aunque no les hagas nada, lo primero que alegan es “violación a sus derechos y violencia al momento de aprehenderlos”, cuando obviamente ellos llevan la “ligera” ventaja de “ensartarte o darte un plomazo” para evitar ser detenidos.

Aún así nos la jugamos pollo, por eso se me hace injusto cuando nos critican por no detenerlos.

Ellos -los malosos- llevan ventaja con abogados que sólo litigan aprehensiones y ya saben qué hacer para “darnos la vuelta”…Lograr “sacar de la calle” a un malandro lleva su tiempo, tiene sus momentos.

Pues cuando cometen un delito, es obvio que saben lo hecho, y lo primero es esconderse, tratar de “enfriar” el asunto y huir del lugar…

Me podrías decir, para eso te pagan. Tienes toda la razón, pero entonces también deja que haga mi trabajo, como yo sé y no como quisieras que fuera. Porque ¿sabes? también hay otros temas que nos reclaman; audiencias, comparecencias, más investigaciones, en fin no es cosa sencilla.

Mira, en otras actividades laborales sí se equivocan, pues se vuelve a imprimir, se corrige, se vuelve a hacer, pero aquí en muchas te equivocas y pierdes la vida. Ya le seguimos a la plática con “Abel”.

La rabadilla del Pollo

Pollos en el tejado me dicen que antes de culminar septiembre se deberán tener los grupos de transición en los 125 ayuntamientos, pues se pretende llegar a noviembre con todos los temas de entrega recepción bien “planchaditos”.

Lo que podría ser la novedad para este esquema es la inclusión de ciudadanos en reuniones de equipos de transición, con ello, obviamente se estaría validando más, mucho más el trabajo previo a la entrega del poder…

¿Cuántos se atreverán a ser transparentes y colocar a ciudadanos sin interés político para ser testigos de la conducción de ambos equipos?…Para emplumados en el hilo se trata de una magnífica oportunidad, sobre todo, porque “meten hielo” a la figura de coordinador…

Por hoy, cierro pico. Shalom.

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