Alfaro ya tiene rival
Las aguas están agitadas y no falta mucho para que ambos frentes den a conocer sus propuestas, las cuales tendrán que pasar por el minucioso tamiz de unos jaliscienses involucrados en la escena política.
Dobleces |
En la disputa por la alcaldía de Guadalajara se marca una tendencia hacia una lucha bipartidista. Por un lado, el partido Movimiento Ciudadano, con el gobernador Enrique Alfaro, como operador de la maquinaria política de Dante Delgado. Por la otra parte, el ex delegado federal Carlos Lomelí quien de acuerdo con las recientes encuestas se ubica con un 63 por ciento de intención de voto frente a sus contrincantes.
En estas elecciones intermedias, la evaluación del gobierno de Alfaro es significativa y el inminente cambio de reglas cocinado desde el Congreso de Jalisco, que preside la morenista Erika Pérez García, la arena política de la entidad comienza a movilizarse para una contienda en la que los únicos dos competidores fuertes van por la conquista de Guadalajara.
De un lado del tablero se encuentra un partido desgastado, pues aunque aclararon desde abril que no utilizarían como carta de presentación al gobernador del estado, Enrique Alfaro, los últimos movimientos del mandatario sin duda mermarán su avance rumbo a los comicios de 2021.
El anticipo no sólo radica en el endeudamiento millonario en el que se ha sumido a los jaliscienses, ni en los abusos de autoridad registrados por toda la entidad, o la ola de inseguridad que los queja, a esto se suma la historia electoral marcada por un constante castigo para la fuerza política en el poder. En eso radica la lucha por una de las alcaldías más codiciadas.
Por la pura referencia a lo que se enfrenta Enrique Alfaro es un ejemplo de su futuro político. El proceso intermedio de 2015 estuvo marcado por la estrepitosa caída de Aristóteles Sandoval frente a Movimiento Ciudadano; mientras que Acción Nacional perdió la gracia del electorado de la mano de Emilio González en 2009. Esa ha sido la suerte de sus antecesores. El escenario parece que no cambia. Aunque Lomelí Bolaños no se ha destapado como aspirante aún, fuentes internas de Morena afirman que estaría en la contienda por Guadalajara en las elecciones del año próximo, encaminándose rumbo al 2024 por la gubernatura de Jalisco. Así se presenta uno de los adversarios visibles al gobernador.
En lo que hace a Jalisco, Lomelí Bolaños ha dicho que “los errores del gobernador Enrique Alfaro lo han enfilado al precipicio” y ha hecho un reiterado llamado a la unidad en Morena, advirtiendo que un partido dividido ayudaría a un debilitado Movimiento Ciudadano.
Ahora el panorama se antoja más que complicado para el partido de Dante Delgado, pues además de tener a cuestas los tropiezos de Alfaro, tampoco ha sido capaz de consolidar su estructura y sólo suma unos cuantos liderazgos reales, escenario que ha proporcionado un caldo de cultivo idóneo para el fortalecimiento de Lomelí Bolaños.
Y es que no es casual que buena parte de la ciudadanía vea a Lomelí Bolaños como uno de los principales destinatarios de su voto, pues además de los donativos de kits para prevenir contagios por Covid-19, así como las miles de pruebas para su oportuna detección, cercanos a su equipo comentan que ahora analiza la instalación de rociadores para sanitizar parques en la urbe.
La propuesta, cuentan, está ligada al alarmante cantidad de enfermos, que llega a los 5 mil casos confirmados en toda la entidad, por lo que buscaría que estos espacios públicos no representen un riesgo para los tapatíos, más aún ahora que se entró a la etapa de “responsabilidad individual”.
Las aguas están agitadas y no falta mucho para que ambos frentes den a conocer sus propuestas, las cuales tendrán que pasar por el minucioso tamiz de unos jaliscienses involucrados en la escena política.
Israel Mendoza Pérez
@imendozape