Senado aprueba que menores de edad abran cuentas de depósito bancario
Pretenden que los casi 7 millones de jóvenes de entre 15 a 18 años dispongan de los fondos depositados en estas cuentas sin la intervención del padre, madre o tutor.
El pleno del Senado aprobó con 110 votos en pro, uno en contra y cero abstenciones un dictamen para que menores de edad abran cuentas de depósito bancario.
Las reformas a la Ley de Instituciones de Crédito y al Código Civil Federal, pretenden que los casi 7 millones de jóvenes de entre 15 a 18 años dispongan de los fondos depositados en estas cuentas sin la intervención del padre, madre o tutor.
Los fondos de estas cuentas serán principalmente los que se obtengan por algún trabajo o, por los programas de gobierno a los que estén inscritos.
Los bancos tendrán la obligación de dar conocimiento a los padres o tutores sobre la apertura de la cuenta y podrán solicitar y consultar los estados de cuenta y movimiento de los depósitos.
Las cuentas no podrán recibir depósitos en efectivo o transferencias electrónicas de personas físicas o morales.
En tribuna, el senador de Morena Alejandro Armenta, presidente de la Comisión de Hacienda, argumentó que es relevante la inclusión a la bancarización de los menores de edad, por tratarse de un segmento discriminado.
“Ya es hora de creer en los chavos, la discriminación ha sido un problema recurrente para las mujeres, para los adultos mayores y para las y los jóvenes, se discrimina también cuando se excluye. Cada vez más jóvenes en México son relegados por diversas situaciones, entre ellas, su condición social, su apariencia física ligada a su condición económica. (…) Por eso este Senado cree en los chicos y apoyamos su fortalecimiento”.
El Banco de México determinará las características, nivel de transaccionalidad, limitaciones, términos y condiciones de las cuentas de depósito bancario que podrán abrir los menores de edad y la prohibición de contratar préstamos o créditos con cargo a los fondos depositados.
Los bancos ofrecerán a los menores de edad un tipo de producto acotado, con la finalidad de proteger su persona, sus derechos y su patrimonio y brindarles certeza jurídica, para que no sean un blanco fácil para el abuso y a la vez evitar el riesgo de endeudamiento, por considerar que se trata de personas que se están iniciando en el uso de los servicios financieros y cuentan con experiencia y conocimientos básicos, que podrían limitarnos en la toma de decisiones adecuadas en materia de créditos.
La minuta se devolvió a la Cámara de Diputados.