Se cumplen 47 años de la muerte de José Alfredo Jiménez
Además de dar sus recitales y conciertos, trabajó en el teatro, en la televisión y en la radio, tanto en México como en el extranjero.
José Alfredo Jiménez Sandoval fue un cantante y compositor mexicano. Creó una gran cantidad de temas, principalmente rancheras, huapangos y corridos, todos ellos reconocidos por su calidad y su sencillez armónica, melódica y lírica.
Hijo de Agustín Jiménez Aguilar y de Carmen Sandoval, nació en el pueblo de Dolores Hidalgo, en el estado mexicano de Guanajuato, donde pasó sus primeros años de vida, hasta poco después de la muerte de su padre en 1936, quien era dueño de una farmacia con la que sostenía económicamente a José Alfredo y a sus tres hermanos: Concepción, Víctor e Ignacio.
Siendo niño se trasladó junto con su familia a la capital de la República, y a los 14 años compuso su primera canción. Pese a demostrar tempranamente su talento innato para la composición, el éxito tardó en sonreírle. Durante su juventud ejerció los más variados oficios, desde el de futbolista en el Marte (un equipo de primera división) hasta el de camarero en un restaurante en el que trabaría una amistad providencial con el hijo del dueño, a la sazón guitarrista del trío Los Rebeldes.
En 1948, acompañado por el trío Los Rebeldes, cantó por vez primera en la radio. Pero no fue hasta 1950 que comenzó a ganar celebridad gracias a su canción Yo (grabada por Andrés Huesca y sus Costeños), que sería el primer título de una larga lista de éxitos. Comenzó así una fructífera carrera que lo convirtió en el más destacado compositor de canciones rancheras en México; los mejores cantantes e intérpretes se disputaban sus temas para incluirlos en su repertorio. Sus melodías fueron interpretadas por Jorge Negrete, Pedro Infante, Miguel Aceves Mejía, Lola Beltrán, Javier Solís y la española María Dolores Pradera, entre otros. De entre sus canciones, son especialmente recordadas El rey, No me amenaces, Amanecí en tus brazos, Paloma querida, Caminos de Guanajuato, Caballo blanco y Un mundo raro.
El éxito como compositor y cantante llevó a José Alfredo Jiménez a una frenética actividad profesional. Además de dar sus recitales y conciertos, trabajó en el teatro, en la televisión y en la radio, tanto en México como en el extranjero. En el cine alcanzó gran popularidad gracias a cintas como Martín Corona (1950), Póquer de ases (1952), Guitarras de medianoche y La feria de San Marcos (1957).
La música de José Alfredo Jiménez arraigó profundamente en el gusto popular mexicano. Sus composiciones adquirieron una enorme popularidad gracias a la belleza y simplicidad de sus letras y melodías y a la expresión sincera y directa de sentimientos con los que el público podía sentirse fácilmente identificado. Verdaderamente el compositor supo plasmar, con realismo y emoción contenida, el amor y el desamor, la nostalgia por la vida campesina, y, en definitiva, toda la gama de los sentimientos humanos, incluyendo el odio, la rabia o el desengaño, así como la ternura y magia que extraía a menudo de cualquier escena en apariencia insignificante de la vida cotidiana.
Se sabe que José Alfredo abrigó en sus últimos años, principios de los 70, una pasión por la joven cantante mexicana Alicia Juárez, con quien grabara un álbum en 1972. Él todavía no llegaba a los 50, pero las imágenes lo muestran como si fuera 15 años mayor.
José Alfredo Jiménez murió en la Ciudad de México, el 23 de noviembre de 1973, a la edad de 47 años, a consecuencia de la cirrosis hepática que padecía desde años atrás. Sus restos descansan en el cementerio de su pueblo natal, tal y como anticipó en su canción “Caminos de Guanajuato”.
Sus grandes éxitos
La chamuscada (Tierra y libertad) (1971)
El caudillo (1968)
Arrullo de Dios (1967)
Me cansé de rogarle (1966)
Audaz y bravero (1965)
Escuela para solteras (1965)
La sonrisa de los pobres (1964)
Las hijas del Amapolo (1962)
Juana Gallo (1961)
El hombre del alazán (1959)
Cada quién su música (1959)
Mis padres se divorcian (1959)
Ferias de México (1959)
Guitarras de medianoche (1958)
La feria de San Marcos (1958)
Pura vida (1956)
Tres bribones (1955)
Camino de Guanajuato (1955)
Los aventureros (1954)
Ni pobres ni ricos (1953)
El enamorado (1952)
Ahí viene Martín Corona (1952)
Los huéspedes de La Marquesa (1951)