Se cumplen 123 años de la muerte de Alfred Nobel
El 27 de noviembre de 1895, Alfred Nobel firmaba su testamento en París. En él establecía la creación de un fondo que se emplearía para otorgar cinco premios anuales.
Este 21 de octubre conmemoramos el nacimiento de Alfred Nobel. Cada año se entrega el Premio Nobel a las mentes brillantes de las diferentes ramas del desarrollo humano y los que buscan contribuir con la paz.
La Academia Sueca es la encargada por Alfred Nobel para seleccionar a los nominados y entregarles los premios. Lo que no se sabe mucho es quién fue el creador de este galardón y su razón de hacerlo.
Alfred Nobel fue un químico sueco que nació en Estocolmo el 21 de octubre de 1833. Su familia se componía de ingenieros y cuando tenía 9 años se mudaron a Rusia, donde fue educado en ciencias y humanidades.
Vivió gran parte de su juventud en San Petersburgo, donde su padre instaló una fábrica de armamento, pero quebró en 1859.
En 1863 regresó a Suecia y continuó su investigación con explosivos junto con su padre. En 1864 murió su hermano Emilio Nobel a causa de una explosión con nitroglicerina. Eso motiva a Nobel para desarrollar una manera de condensar y estratificar las explosiones utilizadas en la minería y construcción. En 1865 desarrolló un mecanismo mejorado de detonación de mercurio.
No fue hasta 1867 cuando creó la dinamita, que funciona para absorber la nitroglicerina en un material sólido y poroso, el cual provocaba una explosión controlada y más limpia en comparación con la que se producía antes. Otros inventos fueron la gelignita y la balistita.
Fundó Dynamit Nobel y AkzoNobel, la última aún existe y se encarga de la producción de pinturas. Se volvió millonario.
Gracias a su trabajo lo denominaron “El mercader de la muerte”. También fue dueño de la empresa Bofors, la cual aún existe y es de las mayores productoras de armamento del mundo.
En 1895, en su lecho de muerte, dejó un testamento donde se plasman las bases del Premio Nobel.