Un desconocido derrota al populismo francés

OPINIÓN / COLUMNA/ Eduardo Ruiz-Healy

En Francia, el populismo que amenaza con acabar con la Unión Europea sufrió ayer su segundo descalabro del año. El primero fue en las elecciones parlamentarias de Holanda, realizadas el pasado 15 de marzo, cuando el neofascista Geert Wilders –el Trump holandés– fue derrotado por el primer ministro Mark Rutte.

La segunda derrota del populismo fue en las elecciones presidenciales francesas de ayer, donde Emmanuel Macron, del movimiento centrista ¡En Marcha! (EM) fue el que más votos obtuvo de entre los 11 candidatos que compitieron. Con 24 por ciento de los votos, Macron superó a la populista y neofascista Marine le Pen, del extremoderechista Frente Nacional (FN), que se quedó con 22 por ciento.

Atrás quedaron los otros nueve candidatos, entre ellos los abanderados de los que otrora fueron los grandes partidos políticos franceses. François Fillon, del centrista Frente Nacional (LR), el partido de los ex presidentes Chirac y Sarkozy, obtuvo 19.8 por ciento; Jean-Luc Mélenchon, del extremoizquierdista La Francia Insumisa (FI), ganó 19.2 puntos porcentuales; Benoit Hamon, del Partido Socialista (PS) del actual presidente François Hollande, apenas logró conseguir 6.5 por ciento; Nicolas DupontAignan, del centroderechista Francia de Pie (DLF), sumó 5 puntos porcentuales. Los otros cinco candidatos acumularon el 4 por ciento restante de los votos.

Los resultados de ayer significan que Macron, de 39 años, y Le Pen, de 48 años, se enfrentarán en una segunda vuelta electoral a realizarse el próximo domingo 7 de mayo.

Curiosamente, las encuestas de opinión no fallaron esta vez como lo hicieron anteriormente en diversas elecciones alrededor del mundo. Ojalá que las encuestas resulten también acertadas en lo que a sus pronósticos para la segunda vuelta se refieren.

Ayer, la de Ipsos le daba a Macron 62 puntos porcentuales de la intención del voto que será emitido el 7 de mayo y a Le Pen 36 por ciento: la de Harris le daba 64 unidades porcentuales al primero y 36 a la segunda. También ayer, después de aceptar su derrota electoral, Fillon manifestó que ahora respalda a Macron y pidió a sus seguidores que voten por éste en la segunda vuelta.

De ganar Macron la Presidencia de Francia el populismo de extrema derecha sufrirá un duro golpe después de haber triunfado en las elecciones presidenciales estadounidenses de noviembre de 2016.

Ahora, sólo nos queda esperar que los populistas no avancen en las próximas elecciones parlamentarias de Reino Unido (junio 8), las legislativas francesas (11 y 18 de junio), y las federales alemanas (septiembre 24), entre otras.

En Francia se validó la tesis de que un candidato desconocido, carismático y con una buena oferta política, es capaz de vencer a un conocido demagogo populista que sólo promueve el odio y la división.

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