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Viernes 22 de Noviembre 2024

Buscan tres infractores de la ley la fiscalía anticorrupción

 

A pesar de que “gozar de buena reputación” es requisito indispensable para aspirar a ser fiscal anticorrupción, tres de los candidatos tienen un oscuro y cuestionable historial, al estar relacionados con delitos o polémicos antecedentes. Además, sus perfiles no acreditan de manera fehaciente los conocimientos y experiencia en materia de transparencia, rendición de cuentas y […]


A pesar de que “gozar de buena reputación” es requisito indispensable para aspirar a ser fiscal anticorrupción, tres de los candidatos tienen un oscuro y cuestionable historial, al estar relacionados con delitos o polémicos antecedentes.

Además, sus perfiles no acreditan de manera fehaciente los conocimientos y experiencia en materia de transparencia, rendición de cuentas y combate a la corrupción, pero la Junta de Coordinación Política del Senado omitió los antecedentes cuestionables de Américo Irineo Meléndez Reyna, Jack Rafael Gorodezky Mirsky y Ricardo Peralta Saucedo y dio entrada a su registro.

En un documento de análisis de los 32 aspirantes a ocupar el cargo de titular de la Fiscalía Especializada en Materia de Delitos relacionados con Hechos de Corrupción, elaborado por la organización Artículo 19, se detallan los hechos en los que se han visto inmiscuidos.

Ricardo Peralta laboró en la Procuraduría General de la República (PGR). Es cinta negra, especialista en tiro y entrenado por israelitas, pero a lo largo de su desarrollo profesional ha sido acusado de “déspota” y “agresivo”, advierte la organización.

En 1996 fue denunciado por allanamiento de morada, lesiones y amenazas en contra de tres ciudadanos, entre ellos una mujer, momento cuando se ostentaba como sobrino del entonces procurador General de la República, Antonio Lozano, hoy defensor del exgobernador de Sonora, Guillermo Padrés.

“(Llegó) en 2010 a la Dirección General de Operaciones de la Policía Ministerial del Estado de México, donde trabajó al lado del subprocurador, Alfredo Castillo, en tiempos del caso Paulette”, indica Artículo 19.

A su vez, Américo Irineo Meléndez Reyna estuvo vinculado en el asesinato de Gerardo Villarreal Rodríguez, pues él fungía como director de la Policía Judicial de Nuevo León cuando varios de sus subordinados torturaron, asesinaron y sepultaron en una fosa a la víctima.

Incluso, el Departamento de Estado de Estados Unidos dio cuenta de este crimen en febrero del año 2000. “Estuvo involucrado en abusos cometidos bajo su mando cuando fue director de la policía, en donde fue cesado de su gestión por la muerte de un detenido”, refiere Artículo 19.

En el perfil que entregó al Senado, Américo Meléndez presume que como delegado de Circuito en PGR y al frente de un grupo de agentes del Ministerio Público, participó en la integración de la averiguación previa en contra de Rafael Caro Quintero.

En tanto, resalta el extenso perfil totalmente en inglés del abogado Jack Rafael Gorodezky Mirsky, a quien el exembajador de Estados Unidos en México, Anthony Wayne, mandó investigar pues se presentaba de manera frecuente a eventos diplomáticos.

La procuraduría capitalina inició, a petición del exembajador, la averiguación FMH/MH-4/T1/0980/13-07 de este abogado de la Anáhuac, quien ha sido encarcelado en dos ocasiones por abuso sexual y extorsión, de acuerdo a reportes de prensa.

Artículo 19 indica que “pasó ocho meses en el Reclusorio Oriente acusado de tentativa de violación, pero salió gracias a un amparo concedido por un tribunal federal, con el trabajo legal de sus abogados, a quienes aparentemente no les pagó”.

Después de que trató de contrademandar a la víctima, lo cual no logró, Gorodezky pidió ayuda, vía cartas, a los entonces mandatarios Vicente Fox y George Bush, así como al cardenal Norberto Rivera.

A pesar de que la designación del fiscal anticorrupción tendría que haber sucedido en el 2014, en el Senado se han alargado los tiempos. En la primera convocatoria sólo se postuló una persona, por lo que se extendió el plazo y se registraron 33 aspirantes.

Sin embargo, se volvió a emitir una segunda convocatoria en la que establecieron un requisito más, pues se solicitaba que quienes busquen convertirse en fiscal deberían de tener experiencia en transparencia, rendición de cuentas, y combate a la corrupción; derivado de esto, de los primeros 33 registrados 22 ya no lo ratificaron; sólo siguieron 11 y se presentaron 21 nuevos perfiles a la selección.

César Aguilar