Brasil vira a la derecha por escándalos de corrupción
Ni siquiera Dilma Rousseff, que era favorita para ocupar un escaño en el Senado, figuró en la primera vuelta electoral
Durante las elecciones de este domingo en Brasil, se dio una reacción generalizada de indignación contra los partidos relacionados a los escándalos de corrupción de Lava Jato.
Figuras históricas en el Senado y la Cámara Baja fueron sustituidos por políticos de la corriente ultraconservadora; como la ex presidenta Dilma Rousseff, quien lideraba las encuestas durante semanas para el escaño de senadora, peroquedó en cuarta posición en los comicios.
Rousseff, quien fue presidenta entre 2011 y 2016, cuando fue destituida por un controvertido juicio político, se postuló para el cargo de senadora para volver a la política, pero apenas obtuvo 14 por ciento de los votos.
Analistas y expertos califican de inédito lo sucedido, quizá por más de cuatro años de escándalos de corrupción que desnudaron un país donde el nepotismo y la corrupción han provocado un descrédito absoluto en los políticos.
Con todo, el mapa electoral resultante de los comicios de ayer está “dividido, en una situación tensa en términos sociales y políticos”, explicó el filósofo y profesor de la Universidad de Campinas, Roberto Romano.
Así, el Partido Social Liberal (PSL) del vencedor en la primera ronda presidencial pasó de elegir un diputado en los comicios de 2014 a convertirse ayer en la segunda mayor formación en la Cámara Baja, con 52 legisladores.
