No hay más corrupción en nuestro gobierno y las cifras del INEGI lo respaldan: AMLO
De acuerdo con el INEGI, el gobierno de AMLO pasó de 86 a 66 en los niveles de percepción de la corrupción de 2017 a 2019.
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que en su gobierno se terminó la corrupción y mostró cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) para demostrar que la población también así lo considera.
Durante la conferencia de prensa matutina, el mandatario mostró su pañuelo blanco y aseguró que la actual administración no tolera a los funcionarios corruptos ni propicia la impunidad.
AMLO pidió proyectar en la pantalla de Palacio Nacional estadísticas de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública 2020 del INEGI, las cuales muestran que ha bajado la percepción de corrupción.
Las instituciones con las mejores calificaciones son la Secretaría Marina, pues sólo 18.2 por ciento de los encuestados la consideró corrupta; la Guardia Nacional obtuvo 23 por ciento: y el Ejército consiguió un 24.4 por ciento.
Por el contrario, las peores evaluadas fueron las policías de tránsito, pues el 77.3 por ciento de las personas las consideró corruptas; le siguen los jueces con 70.1 por ciento; y las policías municipales con 69.7 por ciento.
De acuerdo con el INEGI, la instancia que más redujo la percepción de corrupción entre 2017 y 2019 fue el Gobierno federal, encabezado precisamente por López Obrador, al pasar de 86 a 66 por ciento.
“Esto, nos decía un especialista del INEGI, no se daba, tenía tiempo, y en ninguna parte del mundo, no es para presumir, no les va a gustar a nuestros adversarios”, señaló el presidente en la mañanera.
“Y vamos a continuar combatiendo la corrupción, porque es el principal problema, y antes imperaba, por eso también hay tanta reacción en contra de nuestro gobierno, porque el objetivo principal del gobierno que encabezo es acabar con la corrupción”, explicó.
Recordó que la empresa Vitol confesó en Estados Unidos que entregó sobornos a Pemex e intentaron llegar a un acuerdo reparatorio con el Gobierno federal, pero sin revelar los nombres de los involucrados; lo cual fue rechazado por México.
