Microbiota intestinal de la población se ha visto afectada durante la pandemia por Covid-19
Yadira Rivera Espinoza, científica del IPN, manifestó que entre más copiosa y variada sea la microbiota, los intestinos son más fuertes y capaces de hacer frente a las enfermedades.
La microbiota intestinal, que está formada por billones de microorganismos, produce vitaminas y participa en la generación de defensas, que además de ayudar a la digestión de los alimentos, repercute en una mejor respuesta ante infecciones, incluida la generada por el virus SARS-CoV-2.
Yadira Rivera Espinoza, científica del Instituto Politécnico Nacional (IPN), dijo que la microbiota de los mexicanos ha sufrido cambios importantes y se ha hecho más escasa a partir de que aumentó el consumo de comida industrializada y alimentos altos en carbohidratos y azúcares, lo cual provoca un incremento de bacterias proinflamatorias que causan efectos adversos al organismo y contribuyen a agravar los cuadros clínicos de COVID-19.
Por ello, añadió, es importante mantenerla en óptimo estado mediante una alimentación sana y equilibrada.
La microbiota intestinal es como una “huella dactilar” que empieza a conformarse a partir del nacimiento, la cual, entre más abundante sea, brinda mayores elementos para combatir las enfermedades, ya que los microorganismos se adhieren a las células epiteliales del intestino y forman una barrera de defensa, explicó la investigadora de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB).
Manifestó que entre más copiosa y variada sea la microbiota, los intestinos son más fuertes y capaces de hacer frente a las enfermedades.
“Entre las células hay uniones que se abren para dar paso a los nutrientes que se incorporan al torrente sanguíneo y se cierran cuando detectan agentes patógenos, por ello podríamos afirmar que las personas con una microbiota más rica y diversa son quienes probablemente no presentan síntomas graves ante la COVID-19”, señaló la especialista.
Preciso que cada tipo de microorganismo cumple una función distinta, por ejemplo, las bifidobacterias producen ácido láctico que controla el crecimiento de bacterias patógenas y Prevotella spp. Fermentan diferentes fibras de los alimentos para producir sustancias que llegan a todos los órganos, incluidos los pulmones y el cerebro, a través del sistema circulatorio, lo cual repercute en contar con mayores posibilidades de combatir las infecciones y diferentes tipos de enfermedades.