La millonaria fiesta del Grand Prix
El evento deportivo es una oportunidad para posicionar a México como un país referente del turismo internacional, sin embargo su continuación recaerá en lo que decida el siguiente Gobierno federal
El regreso de la Fórmula Uno a México se anunció en 2014 y el hecho trajo una fiesta en la que no sólo los seguidores del serial automovilístico fueron partícipes.
La apuesta del Gobierno federal por el Gran Premio se presentó como un camino para promover la imagen de México y así atraer a turistas con mayor poder adquisitivo y de nivel internacional.
En ese entonces se informó que el evento representaría un beneficio económico de 2 mil millones de dólares y daría entrada a la creación de 18 mil empleos directos e indirectos.
Las tres ediciones de la competencia que se han disputado en el Autódromo Hermanos Rodríguez, en la Ciudad de México, han dejado una derrama económica que supera el millón de pesos, de acuerdo con cifras de la Secretaría de Turismo (Sectur), mientras que el número de asistentes se mantiene por arriba de las 336 mil personas.
Mientras, la cuarta edición de la Fórmula Uno se desarrollará del 26 al 28 de octubre.
Francisco San José Cabestany, catedrático de la escuela de Ciencias del Deporte de la Universidad Anáhuac México, reconoce la bonanza económica que el ‘Gran Circo’ representa para la economía nacional y el turismo en la capital del país.
200 países transmitieron la carrera que se realizó en 2017
El también especialista en marketing deportivo comenta que cualquier nación que alberga al Gran Premio obtiene beneficios, entre los que destaca la mejora de su reputación ante los ojos del mundo, es decir, su marca país.
“La difusión que se tiene como sede de un evento deportivo de esta magnitud es un privilegio. En este caso, demuestra que México está en las grandes ligas y que merece la atención del mundo”, opina el especialista de la Anáhuac.
Carrera en duda
El contrato para el Gran Premio de México termina en 2019, pero la extensión de su caducidad aún está en duda.
El equipo del presidente electo Andrés Manuel López Obrador adelantó que se analizará si se debe o no continuar con estos eventos deportivos, que el gobierno financia con la iniciativa privada.
El costo para traer el Grand Prix a México fue de 413 millones de dólares, según cifras oficiales. De esta cantidad, Grupo CIE aportó 200 millones y los 213 millones restantes los desembolsó el Gobierno federal, a través del Consejo de Promoción Turística (CPTM)
Las tres ediciones mexicanas de la carrera automovilística fueron reconocidas por la Formula One Management como el mejor evento del año, mientras que CIE fue galardonado como el mejor promotor del serial en dos ocasiones.
Al respecto, Francisco San José Cabestany, opina que se debe realizar una evaluación que permita verificar las ganancias de la inversión federal antes de descartar una renovación.
Por su parte, Rafael Nosti, director de ventas y eventos especiales de Grupo Mundomex, proyecta que el acuerdo para el Gran Prix tendrá una extensión entre dos y cinco años cuando se reconozcan los logros económicos que ha obtenido el país.
“Los nuevos responsables del gobierno lo verán con ojos más maduros cuando lo evalúen. Sería una equivocación que México ya no sea anfitrión de eventos de clase mundial”.
