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Domingo 24 de Noviembre 2024

Joven insiste en hostigamiento de su vecino: ¿Quieren que esté con una bala en la cabeza?

 

Pese al proceso legal y la viralización del caso, Irene señala que las autoridades capitalinas no le brindan suficiente protección para salvaguardar su integridad de más ataques de su agresor.

“No se que esperan las autoridades para hacer algo, ¿quieren que esté con una bala en la cabeza?”, escribió Irene en su cuenta de Twitter para denunciar nuevamente el acoso por parte de su vecino conocido como #LordGolpeador.

Desde 2018, Irene compartió en sus redes sociales la amenaza de su vecino quien, al ver que la joven lo grababa al agredir a su pareja, le dijo “te metes conmigo yo si te rompo la madre”.

“Era junio y se escuchaban los gritos horribles y lo primero que se me ocurrió hacer fue salir a pedirle que la dejara de agredir, desde entonces mi vida cambió”, cuenta en entrevista para Reporte Índigo.

La joven, de 27 años, aunque ha interpuesto denuncias en el Ministerio Público, lamenta que las autoridades dejen de lado la seguridad de las mujeres.

Al no contar con la protección de las autoridades, Irene recuerda que las agresiones escalaron pues en 2019, su vecino la agredió con golpes e insultos.

“La madrugada del cinco de mayo de escupió y pateó, por eso es que fue vinculado a proceso pero lo hace en libertad y a pesar de eso las agresiones no paran, pone música muy fuerte en la madruga para que no se escuche como me insulta, me bloquea la entrada del edificio, cuando me golpeó en el Ministerio Público me dijeron que no podían procesarlo con más fuerza porque mis heridas sanaban en menos de 15 días”, lamenta.

Ante el constante acoso y la poca actividad de las autoridades por ayudarla, Irene de nueva cuenta usó las redes sociales a su favor y publicó que si algo le pasa a ella o a su familia, hacía responsable a la persona que vive en Xola 1408. Interior 503 bajo el nombre de Arturo Said Bernal.

VIVIR CON MIEDO

A pesar de que la denuncia contra LordGolpeador está presente desde hace dos años, el sujeto sigue sin dejar en paz a Irene.

“Fui al MP para decirles que seguía el acoso, fui y comenté para volver a hacer una audiencia donde cambiaran las medidas cautelares y como la juez vio que sí seguía acosándome, lo mandaron a terapia por ser generador de violencia pero, no se me hace justo, eso no es suficiente para proteger mi vida, ya a estas alturas estoy desesperada”, menciona.

Tras la última agresión en su contra, Irene describe que llamó a la escolta que pusieron a su cargo, tardaron más de una hora en llegar al departamento y aun así frente a ellos gritó y chifló y lo único que me dijo el oficial fue que no podía hacer nada ni tocar su puerta para decirle que me deje en paz porque sería molestarlo.“El vecino tiene acceso a armas, tengo miedo de que salga un día de casa y me espere con una pistola”, reclama.

A un día de la Marcha por el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer y la Niña, Irene no duda en afirmar que la frase de Ni una menos, y días como el de ayer, solo son usados para las autoridades para crear una imagen falsa pues aunque en el discurso aseguren proteger la vida de las mujeres, en la práctica no lo hacen.

“Yo solo pido que no me dejen sola, que no se repita esto, sí vivo con miedo pero si no denuncio puede hacerle esto a otra mujer, él ya tenía denuncias en su contra antes que la mía, una incluso por violencia familiar y ya no es válido justificarlo porque se emborrachó, vale más mi vida y la oportunidad de evitar mañana en los periódicos porque algo me pasó y mi mamá tenga que reconocer mi cuerpo”, finaliza Irene.

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