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Jueves 21 de Noviembre 2024

Un día como hoy, pero de 1642 falleció Galileo Galilei

 

Galilei es conocido como el “padre de la astronomía moderna”, el “padre de la física moderna” y el “padre de la ciencia”.


El genio italiano Galileo Galilei falleció el 8 de enero de 1642 en Florencia, cuando tenía 77 años. Pasó sus últimos años de vida bajo arresto domiciliario y al morir, el gran duque de la Toscana Fernando II quiso enterrarlo en la nave principal de la Basílica de la Santa Croce pero el Papa Urbano VIII se negó debido a las acusaciones de herejía que habían pesado sobre el físico. Finalmente, sus restos serían trasladados a un lugar de honor dentro de la basílica y en un monumento construido en su recuerdo.

El que es considerado padre de la astronomía y principal responsable de la revolución científica que se vivió durante el Renacimiento nació en una localidad cercana a Pisa en el año 1564. Fue la insistencia y el deseo de su padre los que le llevaron a estudiar medicina en la Universidad de Pisa, pero durante esta etapa comenzaría a trabajar en el campo que realmente le interesaba: las matemáticas. Galilei era un férreo seguidor de Pitágoras, Platón y Arquímedes.

Galileo acabaría ejerciendo como profesor en Padua, impartiendo clases de geometría, mecánica o astronomía. Además, dedicaría gran parte de su vida a la investigación. Sus estudios sobre la caída de los cuerpos asentaron las bases sobre las que Newton desarrolló la física clásica y la invención del telescopio astronómico redefiniría el campo de la astronomía al permitirle obtener pruebas que respaldaban el modelo heliocéntrico de Copérnico. El telescopio le llevó a descubrir las fases de Venus, las manchas solares o la superficie irregular de la Luna pero sobre todo convencieron a Galilei de que era la Tierra la que giraba alrededor del Sol y no al revés, como la Iglesia pensaba.

Esta posición y la fama que el físico había adquirido con el tiempo llamaron la atención de la Iglesia Católica, que solicitó a Galilei que se retractara de sus afirmaciones heliocéntricas y, al negarse este, le acusó de “sospecha grave de herejía” e hizo que la Inquisición le juzgara. Galileo se vio obligado bajo coacción a abandonar “la falsa opinión de que el Sol es el centro (del Universo) y está inmóvil”, pero se dice que tras acabar su declaración musitó la famosa frase “E pur si muove” (“Y sin embargo la Tierra se mueve).

Galileo Galilei fue condenado a arresto domiciliario durante el resto de su vida. El paso del tiempo le provocó una ceguera que, a pesar de todo, no le impidió continuar sus investigaciones ya que contrató a un aprendiz.