Inicia huelga de 2 días contra el gobierno militar de Sudán

JARTUM, Sudán (AP) — Los manifestantes en Sudán iniciaron el martes dos días de huelga para presionar al gobierno militar a que entregue el poder a una autoridad civil tras el derrocamiento el mes pasado del presidente autoritario Omar al-Bashir. Las conversaciones entre los activistas y el consejo militar que tomó el poder están empantanadas. […]
JARTUM, Sudán (AP) — Los manifestantes en Sudán iniciaron el martes dos días de huelga para presionar al gobierno militar a que entregue el poder a una autoridad civil tras el derrocamiento el mes pasado del presidente autoritario Omar al-Bashir.
Las conversaciones entre los activistas y el consejo militar que tomó el poder están empantanadas.
Las partes no se ponen de acuerdo sobre la composición y jefatura de un consejo soberano que gobernaría el país durante un período de transición de tres años. Las conversaciones, que lograron algunos avances a principios de mes, se empantanaron en torno a un gabinete interino y un organismo legislativo para el período de transición.
Los activistas reclaman una “representación militar limitada” en el consejo soberano, pero los generales se niegan a entregar el poder.
Después del derrocamiento de al-Bashir, quien gobernó durante 30 años, los generales tomaron el gobierno, pero continuaron las protestas y en particular una concentración frente al cuartel general del ejército en Jartum, la capital, para exigir que entreguen el poder.
Los manifestantes son representados por las Fuerzas para la Declaración de la Libertad y el Cambio, una alianza de grupos y activistas de oposición.
Sin embargo, el partido opositor Umma criticó el martes a algunos grupos de la alianza por sus “acciones erróneas y apresuradas”, en particular el llamado a la huelga. No identificó a qué grupos criticaba.
Umma dijo el domingo que se opone a los “preparativos y oportunidad” de la huelga.
El jefe del partido, Sadek al-Mahdi, encabezó el último gobierno elegido democráticamente en el país, que al-Bashir derrocó con apoyo de los militares e islamistas en 1989.
Wajdi Saleh, un negociador de los activistas, dijo que resolvieron llamar a la huelga al suspenderse las negociaciones con las fuerzas armadas. Anteriormente habían amenazado con lanzar una campaña de desobediencia civil si los generales se negaban a atender sus reclamos.