Cuánto pagan aún los mexicanos por el Fobaproa
En 1982, la administración del presidente José López Portillo anunció la nacionalización de la banca mexicana. Ese mismo año, los precios del petróleo en todo el mundo, incluyendo el mexicano, sufrieron grandes pérdidas; esas medidas adoptadas por López Portillo intentaban contener la crisis económica en la que se encontraba inmersa el país.
En 1990 y con el fin de evitar nuevamente una crisis económica como la que ocurrió en la administración de López Portillo, se decidió crear el Fondo Bancario de Protección al Ahorro, mejor conocido como el Fobaproa; en ese entonces, Carlos Salinas de Gortari era presidente de México. Un año después, Salinas de Gortari vendió los bancos a particulares.
La crisis económica de 1994 inició por una falta de recursos en las reservas internacionales de México debido a las crisis pasadas y a la devaluación del peso en las administraciones federales anteriores a la de Carlos Salinas de Gortai. Ese año fue turbulento para México en materia económica; había entrado en vigor el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) con Estados Unidos y Canadá, se venía acarreando el pago de duda pública, la devaluación de la moneda y los precios bajos del petróleo.
Bill Clinton, presidente estadounidense de 1993 a 2001, autorizó una línea de crédito para México por la cantidad de 20 mil millones de dólares para que el gobierno federal pudiera garantizar el pago de sus compromisos. Esta crisis económica fue conocida mundialmente como el ‘efecto Tequila‘, en México se conoce como el ‘error de diciembre‘, el cual se le atribuye a la administración de Carlos Salinas y su equipo económico, encabezado en la Secretaría de Hacienda por Jaime Serra Puche.
Actualmente, todos los mexicanos seguimos pagando lo que Estados Unidos prestó al gobierno mexicano, pues desde 1999, el costo del Fobaproa, el dinero usado para rescatar a los bancos de las crisis económica, se convirtió en deuda pública.
Sin embargo, el país todavía está lejos de terminar el pago del Fobaproa debido a los intereses y las comisiones de deuda. Quien administra ahora el Fopabroa es el Instituto de Protección al Ahorro Bancario
