En México 63% de la población infantil ha sufrido castigos corporales, denuncian especialistas
Verónica Juárez Piña, dijo que durante años, las niñas, niños y adolescentes han sido víctimas de castigos como medida disciplinaria correctiva dentro del hogar, en las escuelas o cualquier otra institución.
Diputadas y especialistas denunciaron que en México, el 63 por ciento de menores entre 1 y 14 años han sufrido castigo corporal y humillantes; es decir 24 millones de niñas, niños y adolescentes.
En Parlamento Abierto denominado Hacia la prohibición de castigos corporales y humillantes, dijeron que los castigos corporales son utilizados como métodos educativos.
Precisaron que estas prácticas, en un 70 por ciento, se registran en zonas urbanas y en zonas indígenas baja en un 50 por ciento.
Ante ello, se pronunciaron a favor de la minuta del Senado con reformas a ley General de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes, así como al Código Civil Federal para prohibir el castigo corporal y humillante como método correctivo y disciplinario.
Al respecto, Patricia Colchero Aragonés, Coordinadora de Investigación y Estudios del Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), destacó que poner fin a toda forma de violencia es una línea prioritaria.
Explicó que prohibir los castigos corporales humillantes no implica que los adultos dejen de poner límites, orienten y eduquen.
“En concreto que establece esta reforma. Establece con precisión y eso es muy importante, que es un castigo corporal y humillante, brinda una definición. Lo coloca como uno de los tipos de violencia en contra de los niños, niñas y adolescentes y como un tipo de violencia familiar que además de un delito”.
“Lo prohíbe como cualquier tipo de método correctivo o disciplinario. No deja a la libre interpretación si la disciplina con violencia pueda ser ejercida contra niñas, niños y adolescentes. No es punitiva, esa no es la idea, justamente es educativa”.
Rafael Brito Miranda, procurador de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes y la Familia del Sistema DIF de Morelos, por su parte, pidió precisar la importancia de una disciplina positiva.
“Hay que diferenciar. Eliminar el castigo no significa dejar que las niñas, niños y adolescentes lo que su libre albedrio les indique. Sin embargo, hay que precisar que hay distinción en una disciplina negativa y una crianza negativa a una disciplina positiva que pretende tener una comunicación afectiva para con niños, niñas y adolescentes. Luego entonces es pertinente precisar que tengan un cuidado y disciplina positiva”.
La diputada del PRD, Verónica Juárez Piña, dijo que durante años, las niñas, niños y adolescentes han sido víctimas de castigos como medida disciplinaria correctiva dentro del hogar, en las escuelas o cualquier otra institución.
“En muchos casos esta medida fue de carácter corporal, ya sea mediante una nalgada, bofetada o inclusive el famoso cinturonazo, la falta de alimento u otras prácticas más severas. Frente a ello, y siendo que la mayoría de las personas han pasado por dicha experiencia, es que se percibe como práctica tolerada o aceptada en nuestra sociedad”.
Manifestó que es una práctica contraria a la dignidad humana y que se refleja en nuestra muy violenta sociedad.