Día Internacional contra la corrupción
Cada 9 de diciembre a nivel mundial se conmemora el Día Internacional contra la Corrupción, un delito grave que frena el desarrollo económico y social en todas las sociedades.
La Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 9 de diciembre de cada año como el Día Internacional contra la Corrupción, a través de la resolución A/RES/58/4, del 31 de octubre de 2003, con la finalidad de aumentar la sensibilización respecto de la corrupción.
De igual forma, el 31 de octubre de 2003, la Asamblea General aprobó la “Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción”, en la que pide al Secretario General que designe la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, secretaría de la Conferencia de los Estados Parte en la Convención, bajo la dirección de ésta.
La finalidad de la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción es:
- Promover y fortalecer las medidas para prevenir y combatir más eficaz y eficientemente la corrupción.
- Promover, facilitar y apoyar la cooperación internacional y la asistencia técnica en la prevención y la lucha contra la corrupción, incluida la recuperación de activos.
- Promover la integridad, la obligación de rendir cuentas y la debida gestión de los asuntos y los bienes públicos.
Lo anterior, es creado debido a que, la corrupción es un complejo fenómeno social, político y económico, que afecta a todos los países. Por ejemplo, socava las instituciones democráticas al distorsionar los procesos electorales, pervertir el imperio de la ley y crear atolladeros burocráticos, cuya única razón de ser es la de solicitar sobornos. También atrofia los cimientos del desarrollo económico, ya que desalienta la inversión extranjera directa y a las pequeñas empresas nacionales les resulta a menudo imposible superar los gastos iniciales requeridos por la corrupción.
Del mismo modo cada año se paga un billón de dólares en sobornos y se calcula que se roban 2,6 billones de dólares anuales mediante la corrupción, suma que equivale a más del 5% del producto interior bruto mundial. De acuerdo al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, se estima que en los países en desarrollo se pierde, debido a la corrupción, una cantidad de dinero diez veces mayor que la dedicada a la asistencia oficial para el desarrollo.