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Jueves 07 de Noviembre 2024

Dan 27 años de prisión al sacerdote Francisco Javier por el homicidio de Leonardo Avendaño

 

Tras salir de esa audiencia, el hermano de la víctima, Josué Avendaño, declaró que el juez del caso determinó que el sacerdote estuvo con Leonardo en la parroquia Cristo Salvador el día que el joven desapareció y durante sus últimas horas de vida.


Un juez dictó 27 años y seis meses de prisión al sacerdote Francisco Javier Bautista por el delito de homicidio calificado contra el estudiante universitario y seminarista Hugo Leonardo Avendaño, de 29 años de edad, asesinado en junio de 2019.

Tras una audiencia en las salas de juicios orales del Reclusorio Preventivo Varonil Oriente, el juez determinó que el cura pasará esa cantidad de tiempo encarcelado y deberá pagar una reparación del daño de 422 mil 450 pesos; así como lo equivalente a los gastos funerarios de Leonardo.

Luego de casi dos años del asesinato, este martes Francisco Javier Bautista fue declarado culpable del crimen perpetrado durante la madrugada del 12 de junio de 2019 en la alcaldía de Tlalpan.

Tras salir de esa audiencia, el hermano de la víctima, Josué Avendaño, declaró que el juez del caso determinó que el sacerdote estuvo con Leonardo en la parroquia Cristo Salvador el día que el joven desapareció y durante sus últimas horas de vida.

Al salir de la audiencia del fallo condenatorio, éste mencionó que la defensa habría querido obtener la pena máxima de 50 años, pero respetan la decisión tomada por el juez.

La mañana del 12 de junio de ese año, el cadáver del diácono fue localizado por policías capitalinos, abandonado al interior de su vehículo en la colonia Héroes de 1910 y con signos de asfixia.

Una semana después, el sacerdote fue detenido como principal sospechoso del asesinato. Según la investigación, fue el mismo Bautista quien avisó a los familiares de Leonardo que el estudiante se encontraba desaparecido.

Las autoridades encontraron en su teléfono celular un mensaje que el joven envió al párroco cuando arribó a la iglesia para reunirse con él; además de que avisó a otro familiar que se encontraría en ese lugar.