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Sábado 16 de Noviembre 2024

Conoce los datos sobre Carl Sagan

 

Carl Edward Sagan, fue un astrónomo, astrofísico, cosmólogo, astrobiólogo, escritor y divulgador científico estadounidense.


Era casi como una llamada de otro planeta: la invitación al joven astrónomo a dejar Brooklyn y visitar los lagos y desfiladeros del estado de Nueva York.

“Cuando apareció una carta de Carl Sagan en mi buzón,” dijo Neil deGrasse Tyson, recordando la invitación que recibió en 1975 en una reciente charla en la Biblioteca del Congreso. “Yo no me lo podía creer. La gente famosa no escribe algo a un extraño sin motivo alguno”.

Pero la invitación era real. Era la respuesta a su solicitud para entrar en la universidad de Cornell, y Tyson se reunió con el famoso profesor en una visita poco después. Sagan le ofreció, a los 17 años de edad, la oportunidad de poder ir al campamento de astronomía, pero Tyson finalmente terminó en Harvard en lugar de Cornell.

De todos modos, tanto la visita como las formas o la invitación eran algo típico de Carl Sagan.

“Trabajó muy duro por sus estudiantes, para que ellos consiguieran trabajo, se preocupó por su educación, y muchos de ellos están muy bien situados ahora”, dice William Poundstone, autor de Carl Sagan: Una vida en el cosmos. “Si hablas con la gente a la cual él inspiró, con los que lo conocieron, su respuesta será uniforme y efusiva.”

“Sagan fue sin duda el científico estadounidense más famoso de la década de 1980 y principios de 1990”, dice el experto en periodismo científico Declan Fahy de la American University en Washington, DC. “Después de que Cosmos llegase a medio mundo, y su fama llegó a otro nivel, y el libro de la serie pasó más de 70 semanas en la lista de los más vendidos. ”

Pero ¿quién era Carl Sagan? Científico, celebridad, escritor, profesor, escéptico, y librepensador, él era mucho más que el narrador de una serie de televisión.

“Parte de lo que lo hizo grande fue el número de objetivos que perseguía”, dice David Morrison, director del Centro Carl Sagan para el Estudio de la Vida en el Universo, en el Instituto SETI en Mountain View, California. Morrison estaba alucinado con la dimensión de los logros de Sagan y su falta de ego.

“Trabajaba muy duro, 18 horas al día. Tenía una enorme ambición en su trabajo”, dice Poundstone. “Tenía un don para la televisión, estaba muy seguro, y se le veía muy relajado con sus pantalones vaqueros, cuando otros científicos no podrían haberlo hecho. A pesar de ello, había algo más grande reservado para el”.

Como científico, Sagan marcó un cambio en la ciencia planetaria en la década de 1970 como el joven profesor de Harvard que era, “en un momento en el cual la ciencia planetaria estaba en un remanso,” dice Poundstone.

Sagan predijo por primera vez que el efecto invernadero hacía que la atmósfera de Venus estuviese lo suficientemente caliente como para derretir el plomo, en un momento en el que algunos científicos especularon que sus nubes podrían ocultar océanos, dijo Morrison.

Sagan también identificó las regiones sombreadas en Marte como tierras altas e identificó las áreas más claras como las llanuras del desierto marcadas por las tormentas de polvo.

En las dos misiones Voyager lanzadas en 1977 para explorar Júpiter, Saturno, Urano, y Neptuno, Sagan era uno de los miembros del equipo. “Eso fue realmente antes de alcanzar la fama”, dice Morrison, un antiguo alumno de Sagan. “No era una superestrella entonces, sólo uno más entre nosotros.”

Sagan dirigió el equipo que armó los “discos de oro” de las dos naves espaciales de la misión Voyager. Los registros (enviados junto con las agujas de fonógrafo) incluyen canciones de todo tipo, desde Bach a “Johnny B. Goode”, junto con saludos y sonidos naturales de la Tierra.

Los periodistas se dirigieron a Sagan en esas misiones, dice Poundstone. “Sabían que podía explicar las cosas.” Sagan terminó como un habitual en el Tonight Show (como Tyson ahora en Comedy Central), como uno de los invitados favoritos de Johnny Carson.

Posteriormente llegarían las amenazas de muerte. Estas, en parte, derivan del trabajo de Sagan en el “Proyecto Libro Azul” de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, que investigó los ovnis en los años 1950 y 1960. “Empezó con la mente abierta, pero llegó a la conclusión de que no había ninguna evidencia de extraterrestres que visitasen la Tierra”, dice Poundstone. Sin embargo, Sagan fue un gran defensor de la probabilidad de que existiese vida en otros lugares del universo.

Sagan también entró en el debate sobre el calentamiento global, como el autor principal de un estudio en 1983 de la revista Science sobre el “invierno nuclear”. En él hablaba de cómo podía cambiar el clima por culpa de las nubes de polvo levantadas por culpa de las pruebas nucleares de las superpotencias.

No se sabe si enfadó más a los fans de los OVNIS o a los detractores del invierno nuclear, pero Morrison recuerda que después de ambas publicaciones Sagan recibió amenazas. “Se tenía quer esconder en su oficina de Cornell y utilizaba la puerta trasera para llegar al trabajo”. En la era de los “Unabomber” explosivos contra los profesores, las amenazas fueron tomadas en serio.

“La ciencia es más que un conjunto de conocimientos. Es una manera de pensar, una manera de interrogar con escepticismo al universo con la delicada comprensión de la falibilidad humana”, dijo Sagan en su última entrevista con Charlie Rose de PBS en 1996. Murió ese mismo año de cáncer.

El poder del pensamiento escéptico se muestra en su libro de 1995, El mundo y sus demonios: La ciencia como una vela en la oscuridad, en el que trató de explicar el método científico para los lectores en general. Sagan no era escéptico sobre todo: también fue un defensor de la marihuana, y abogó por ella en usos medicinales en los años previos a su muerte.

“Hacer algo significativo, eso fue en el centro de toda su vida”, dijo Ann Druyan, la tercera esposa de Sagan, al hablar en la Biblioteca del Congreso, donde los papeles de Sagan fueron donados a sus colecciones.

Druyan, la tercera esposa y frecuente colaboradora de Sagan, fue la coguionista del Cosmos original y forma parte del equipo de producción de la nueva serie. Sagan escribió 20 libros y cientos de estudios científicos. Sin embargo, su fama le trajo críticas de otros científicos, y un desaire de la Academia Nacional de Científicos, a la cual fue nominado para ser miembro, pero no aceptó.

“Eso es sólo parte de la naturaleza humana: la envidia y el resentimiento”, dice Poundstone

Hoy en día, Cosmos es recordado por su difusión sobre el espacio y por ser la inspiración de muchos jóvenes científicos. Según Fahy, “necesitamos más gente como Carl Sagan”.