Comunidades indígenas decidirán futuro del Tren Maya

El titular del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Rogelio Jiménez Pons, reiteró que si la población no aprueba el Tren Maya, este proyecto se cancela e insistió en que la infraestructura de ninguna manera devastará selva ni ecosistemas, como ejidatarios y organismos civiles aseguran.

Recientemente grupos indígenas de Campeche, Quintana Roo y Yucatán, entre ellos el Frente Peninsular por la Selva (FPVS), Culture Box Project (CBP), Ka Kuxtal Much’ Meyaj A.C., Kanaantaal Sijnal A.C., Frente Campesino en Defensa de la Tierra y la Vida, A.C., Red de Productores de Servicios Ambientales A.C., y la Escuela de Agricultura Ecológica Yits Ka´an A.C., calificaron la consulta como “una burla”, además de que la región será deforestada y contaminada.

Además, especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y el departamento de Producción Económica de la Universidad Autónoma Metropolitana-Xochimilco (UAM) alertaron sobre los daños a “las actividades productivas tradicionales”.

En conferencia de prensa, Jiménez Pons replicó que la obra utilizará los derechos de vía existentes, por lo que descartó que con el trazo del tren vaya a perderse selva.

Dijo que la consulta ciudadana se realizará el 15 de diciembre, y se colocarán urnas para las comunidades mayas en Reforma (Bacalar), Cobá (Tulum), Xul-Há (Felipe Carrillo Puerto) y X-Hazil (Othón P. Blanco).

Anabel López, del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas, dijo que habrá una campaña de información en lengua maya y las radios comunitarias la difundirán e iniciará mañana, la fase informativa inicia este viernes en Yucatán y el sábado en Quintana Roo, posteriormente se hará una asamblea consultiva que tendrá lugar los días 14 y 15 de diciembre.

Apuntó que esta consulta se hará con los estándares más altos a nivel internacional y anunció la presencia de observadores de la ONU.
En caso de que se vote a favor, para el año 2020 se empezarían a realizar las primeras licitaciones y trabajos en los que se prevé una primera inversión de entre 10 mil y 11 mil millones de pesos, y el compromiso es que el tren empiece a operar en el 2023.

Por su parte, el gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, aseguró que su gobierno apoyará el trabajo de las consultas que se harán en los próximos días.

Cabe señalar que uno de los empresarios que ya manifestó su interés por participar en este proyecto es Carlos Slim.

Según estimaciones del gobierno federal, esta obra generará ganancias de al menos 46 mil millones de pesos al año, con un 70% de transporte de carga y 30% en movilidad de pasajeros y turismo.

El Tren Maya tendrá 17 estaciones que se extenderán por los municipios de Palenque, Chiapas; Tenosique, Tabasco; Calakmul, Escárcega y Xpujil, en Campeche.

Así como Maxcanú, Mérida, Izamal, Chichén Itzá y Valladolid, en Yucatán; Puerto Morelos, Playa del Carmen, Cancún, Tulum, Felipe Carrillo Puerto y Bacalar, en Quintana Roo.

Por: Silvia Reyes