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Lunes 25 de Noviembre 2024

Aumentan capacidad neuroprotectora del té verde

 

México, 1 May (Notimex).- Científicos españoles lograron modificar la química del antioxidante del té verde para aumentar su capacidad neuroproductora in vitro, lo que significaría aprovechar sustancias de origen vegetal que retrasarían la aparición de enfermedades degenerativas y procesos patológicos como Alzheimer, Parkinson y cáncer. Los expertos de los institutos de Catálisis y Petroleoquímica y […]


México, 1 May (Notimex).- Científicos españoles lograron modificar la química del antioxidante del té verde para aumentar su capacidad neuroproductora in vitro, lo que significaría aprovechar sustancias de origen vegetal que retrasarían la aparición de enfermedades degenerativas y procesos patológicos como Alzheimer, Parkinson y cáncer.

Los expertos de los institutos de Catálisis y Petroleoquímica y de Parasitología y Biomedicina “López-Neyra”, explicaron que una taza de té verde contiene aproximadamente 80 miligramos de un compuesto antioxidante denominado EGCG, y conserva sus propiedades porque los componentes bioactivos no se ven alterados.

De acuerdo con la información de los institutos que pertenecen al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), lograron modificar el EGCG en agua a 50 grados centígrados, mediante una enzima de una bacteria.

“El trabajo demuestra que la modificación química de la estructura del EGCG mediante la incorporación de una glucosa, permite aumentar su efecto neuroprotector”, detallaron.

Ese efecto se relaciona con la actividad antioxidante de las moléculas, incluyendo su capacidad para reducir los radicales libres.

A diferencia del té negro, el té verde (Camellia sinensis) no se somete a procesos de oxidación durante su procesamiento, por lo que el estudio se centra en este tipo de bebida.

Sin embargo, muchas de las sustancias químicas muestran una baja biodisponibilidad, por lo que continuarán los estudios de laboratorio para futuras aplicaciones de esos compuestos para la atención de enfermedades neurodegenerativas.

Francisco J. Plou, del Instituto de Catálisis y Petroleoquímica, detalló que las sustancias químicas ubicadas en el té verde están conjugados con una molécula de azúcar (principalmente glucosa), por lo que decidieron glicosilar el antioxidante EGCG para mejorar sus propiedades.

“En definitiva, la modificación química de la estructura del antioxidante mediante la incorporación de una glucosa, permite aumentar el efecto neuroprotector de esta molécula”, señaló el especialista.

– Fin de nota –

NTX/MSG/MAG