Manual para mujeres de la limpieza
La primera vez que leí Manual para mujeres de la limpieza, sin parar más que para comer, un fin de semana lluvioso hace dos años, en el manuscrito que la editorial Farrar Straus & Giroux preparaba para la edición, me emocioné por varios motivos. Porque me parecía increíble que esos cuentos dolorosos, hermosos y llenos […]
La primera vez que leí Manual para mujeres de la limpieza, sin parar más que para comer, un fin de semana lluvioso hace dos años, en el manuscrito que la editorial Farrar Straus & Giroux preparaba para la edición, me emocioné por varios motivos. Porque me parecía increíble que esos cuentos dolorosos, hermosos y llenos de humor negro, hubieran pasado casi inadvertidos para sus contemporáneos (Berlin murió en 2004, el día de su cumpleaños), y porque en el mundo de la edición aún era posible hacer justicia y descubrir, en esta era de hipercomunicación mediática y globalización, un auténtico tesoro que estaba allí, como la carta robada de Poe.
Más de un año después, la publicación americana e inglesa daba pie a portadas de suplementos literarios (con las bellísimas fotos de esa mujer que lo había sido todo ?enfermera, mujer de la limpieza, maestra, alcohólica, cuentista magistral? y el libro se alzaba como uno de los mejores libros del año en todos los medios. Siguieron las subastas por los derechos, y las grandes páginas de La Vanguardia y El País, que se adelantaban al fenómeno en España y ponían a Berlin al mismo nivel de Carver y Bukowski.
Me emociona ahora también descubriros este libro. Y os envidio: envidio ese momento mágico ?podemos pasarnos años esperándolo? en que empiezas a leer las primeras páginas y entiendes que estás ante un nuevo clásico.
María Fasce, Directora literaria de Alfaguara
Tras años de injusto olvido, Alfaguara se suma al fenómeno editorial del descubrimiento de Lucia Berlin, el secreto mejor guardado de la literatura estadounidense, una auténtica revolución literaria.
XVII Premi Llibreter 2016