La sombra de Trump en el Buen Fin

Los representantes del comercio establecido, tanto federal como de la capital del país, estiman que se ha creado un ambiente de incertidumbre entre la población mexicana, por el clima de temores debido a que podría hacer Donald Trump como presidente de Estados Unidos.

Aún así, coinciden también en que esta campaña anual de reactivación de la economía interna tendrá buenos resultados, aunque un poco más bajos de las expectativas.

En 2015 las ventas totales fueron superiores a los 80 mil millones de pesos, un diez por ciento superiores a 2014.

Para el Buen Fin de 2016 los centros de información empresarial estimaban que el incremento en las ventas podría ser superior entre 6 y 12.5 por ciento (de 85 a 90 mil millones de pesos en todo el país).

Pero en el nuevo escenario la visión pesimista, aunque estima que habrá crecimiento. Éste podría ser de sólo 4 por ciento.

La visión pesimista

Enrique Solana Sentíes, presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servytur)  indicó que si hay preocupación por la posible baja de las venta, pero también existe la confianza de que algunas personas decidan hacer compras antes de que concluya el año justamente por la incertidumbre.

En entrevista con CAPITALMEDIA, el líder del comercio establecido en todo el país, dijo: “Yo espero que quien va a comprar ya lo tenga previsto, cuenten con el recurso y la convicción. Pero hasta después del  Buen Fin no lo podemos saber.

Hay un riesgo de que se nos caiga y la meta de venta quede en cuatro por ciento” superior a la del año pasado.

Pero también, dijo, hay gente que piensa que si las cosas van a seguir subiendo, lo mejor es adquirirlo lo más pronto posible. Cualquier escenario es posible, pero no se pueden hacer pronósticos reales ante una situación que nos “desestabiliza”.

El otro escenario

En su oportunidad, el presidente de la  Cámara Servicios y Turismo, en la Ciudad de México (Canaco), Humberto Lozano Avilés, señaló que el Buen Fin esta “más vigente que nunca” y ofreció dos razonamientos:

“Frente a la incertidumbre, las personas pensamos en dos  cosas; uno, qué hacer ante necesidades y el desconocimiento de como vendrá la economía y mejor no gasto mi dinero; el otro escenario es que antes de que suban los productos y cuesten más y se tiene el  recursos  tomar ofertas de meses sin intereses para evitar que suban.

“Normalmente la que gana es la segunda; es decir, el que la gente sale  y compra ante la incertidumbre, gana más la certeza de que suben más los precios que los intereses del gasto porque el dinero que tengo hoy me alcanza para comprar un refrigerador y no sé cuánto suba el año que entra”, puntualizó.

Rosalba Amezcua